domingo, 1 de octubre de 2017

TODO LO QUE DEBES SABER SOBRE LA HEPATITIS C

Hoy, día 1 de octubre, es el Día Internacional de la Hepatitis C, una enfermedad prevalente en todo el mundo que afecta a 150 millones de personas, que es la causa de muerte de 399.000 personas al año en el mundo, que tiene un acceso limitado al diagnóstico y al tratamiento y para la cual no existe vacuna todavía. Por todo ello, he querido dedicar esta entrada del blog a dicha enfermedad.

Por definición, una hepatitis es una inflamación del hígado por una infección vírica. Hay 5 tipos de hepatitis, cada una de los cuales se designa con una letra (A, B, C, D o E) y cuya transmisión y virus causante varían de unas a otras. Sin embargo, las dos principales son B y C, que son responsables del 96% de la mortalidad mundial por estas infecciones.

El virus de la hepatitis C (VHC) es un virus animal esférico envuelto por una nucleocápside icosaédrica y con un ARN simplexo de polaridad positiva. Pertenece a la familia Flaviviridae y al género Hepacivirus.


La sintomatología es similar a la de las otras hepatitis: infección crónica en el 55-85% de los casos (como en la hepatitis B, aunque con una mayor probabilidad de cronificación), cirrosis y cáncer hepático (5-20% de los afectados). Sin embargo, la sintomatología aparece años después, por lo que probablemente haya muchas personas que desconocen que la padecen.

La transmisión es por contacto con sangre o, raras veces, por transmisión sexual.


Además, cabe destacar que existen fundamentalmente 6 genotipos de hepatitis C que se asocian con las diferentes cepas del virus. No obstante, los genotipos 1, 2 y 3 son los más frecuentes y, más concretamente, el genotipo 1, que representa el 60-70% de las infecciones mundiales. Conocer el genotipo causante es muy importante para elegir el tratamiento adecuado en cada caso, ya que cada uno de ellos responde de una manera diferente a los medicamentos. Por ejemplo, el tratamiento con interferón y ribavirina es exitoso en un 70-90% de los pacientes con genotipos 2 y 3, pero solamente es efectivo en el 40-60% de aquellos con el genotipo 1.

Tal y como decíamos al principio del post, la diferencia con respecto al resto de hepatitis es que para la C no existe vacuna y el tratamiento no se administra hasta que los pacientes llegan a un estado grave debido a su alto coste. Y más de uno se preguntará: ¿a cuánto asciende la cifra? Pues bien, el precio es dialogado por la farmacéutica que comercializa el tratamiento con cada país, pero en España, por ejemplo, el tratamiento de 12 semanas (válido para los genotipos 1 y 2) cuesta 25.000 euros. Sin embargo, se estima que el coste de su producción ronda tan solo los 110 euros. Y si esto es así, ¿entonces por qué se vende tan caro? Nos topamos ante la disyuntiva de siempre: la farmacéutica ha tenido que dedicar una cuantiosa cantidad de dinero a la investigación hasta dar con la tecla, además de esfuerzo y tiempo, y ahora quiere amortizar esos gastos. Si lo pensamos fríamente, es lógico que ese precio deba remunerar ese trabajo, pero por otro lado se encuentran los pacientes que necesitan ese tratamiento urgentemente. Nada nuevo bajo el sol. Igualmente, en este caso se aprecia que la diferencia entre el supuesto gasto de producción y el precio de venta es muy grande.


En cualquier caso, el tipo de tratamiento puede ser:

-Interferón α + ribavirina: el interferón α es una citocina y un modificador de la respuesta biológica que estimula el sistema inmunitario favoreciendo la comunicación entre las células. La ribavirina, por su parte, es un análogo de un nucleósido y actúa sobre la replicación viral. Este tipo de tratamiento es eficaz en el 60% de los casos, pero la OMS recomienda el uso de los AAD (Antivirales de Acción Directa).

-Boceprevir y telaprevir: ambos son AAD de primera generación que deben ser administrados junto con interferón y ribavirina. Actúan como inhibidores de la proteasa viral, lo cual hace que la poliproteína formada no se pueda escindir y, por lo tanto, se corta el ciclo. El uso de estos AAD era recomendado en 2014, pero ahora la OMS aconseja abandonarlos porque presentan efectos adversos más frecuentes y menor probabilidad de curación que los AAD más recientes.

-Simeprevir, daclatasvir y sofosbuvir: estos son los nuevos fármacos que las compañías farmacéuticas han desarrollado más recientemente con el objetivo de aumentar la tasa de curación, acortar el tiempo de la terapia y reducir los efectos secundarios e interacciones con otros fármacos como los del VIH, lo cual es muy importante porque muchos pacientes con hepatitis C también presentan VIH debido a que ambas enfermedades tienen la misma vía de propagación. Estos tres fármacos son AAD de segunda generación, actúan como inhibidores de la ARN polimerasa viral y son los preferidos por las OMS, con una tasa de curación superior al 95%.

Por lo tanto, ya existen tratamientos bastante efectivos. Ahora solo falta lograr que todo el mundo tenga acceso a dicho tratamiento.

miércoles, 13 de septiembre de 2017

EL 33% DE LA POBLACIÓN NO SE INTERESA POR LA CIENCIA PORQUE NO LA ENTIENDE

¡Buenas, lectores! En esta ocasión no he venido a hablar sobre algún tema científico en concreto, sino sobre el interés de la población en la ciencia y su opinión al respecto. 

Navegando en internet entre innumerables curiosidades científicas, me he encontrado con unos datos estadísticos publicados por el FECYT (Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología) y me ha apetecido elaborar a mí también unos gráficos con la información que más me ha interesado o sorprendido. Antes de nada, quiero decir que los datos proceden de la VIII Encuesta de Percepción Social de la Ciencia, realizada en 2016, y que el FECYT lleva realizando esta encuesta desde 2002 de manera bianual.

Dicho esto, sin más dilación, procedo a mostraros mis gráficos juntos con mis comentarios correspondientes.

EVOLUCIÓN DEL INTERÉS POR LA CIENCIA Y LA TECNOLOGÍA


Además del visible aumento de la población interesada en la ciencia y la tecnología a lo largo del tiempo, hay que destacar que dicho interés se ve indudablemente incrementado con el nivel de estudios y disminuido con la edad, siendo los jóvenes entre 15 y 24 años con enseñanza universitaria los más apasionados. 

En cuanto al sexo, los resultados reflejan que sigue habiendo un mayor porcentaje de hombres interesados por la ciencia que de mujeres, pero esta diferencia es mucho menor que hace dos años. La predilección en hombres se ha visto reducida mientras que el porcentaje de mujeres que tienen interés por esta rama del saber humano ha aumentado.

RAZONES DE LA FALTA DE INTERÉS POR LA CIENCIA


El hecho de que la razón mayoritaria del desinterés por la ciencia sea la no comprensión es un dato triste pero a la vez alentador y nos debe armar de valor para divulgarla y hacerla llegar a más gente de una forma más amena y fácil de entender. La ciencia muchas veces es compleja, pero en otras muchas ocasiones se puede contar de una forma más sencilla para que la población adquiera, al menos, una base científica. Porque no olvidemos: la ciencia también es cultura.

OPINIÓN POPULAR SOBRE BENEFICIOS Y PERJUICIOS DE ALGUNAS APLICACIONES DE LA CIENCIA




Observando estas gráficas, llama la atención, sin duda, el escaso porcentaje de gente en estas dos últimas gráficas que piensa que existen más beneficios que perjuicios. De hecho, este porcentaje es incluso claramente inferior al de las personas que creen que estas aplicaciones tienen más perjuicios. Y lo cierto es que ni la clonación ni las plantas modificadas genéticamente están gozando de una gran aceptación popular. A pesar de esto, en este segundo tema, el de los OMG (Organismos Modificados Genéticamente), sí se ha observado un importante cambio con respecto a 2014, puesto que el porcentaje de defensores ha aumentado en detrimento de los detractores.

Otro dato que me ha sorprendido es que el 5,8% (es decir, más de 1 de cada 20) de los encuestados piensa que los perjuicios de la ciencia y tecnología, en términos generales, son mayores que los beneficios que aportan, y eso me demuestra aún más la necesidad de divulgar la ciencia.

5 PROFESIONES MEJOR VALORADAS POPULARMENTE


En contraste con el desalentador resultado anterior, tenemos este otro, que es muy gratificante: la profesión científica ha obtenido una valoración de 4,22 sobre 5 entre los encuestados, convirtiéndose así en la segunda mejor valorada popularmente (después de los médicos) entre todas las que se han incluido en la encuesta.

FUENTE DE INFORMACIÓN CIENTÍFICA FAVORITA


Este gráfico nos muestra la repercusión de las nuevas tecnologías y vemos cómo internet es la fuente más elegida para estar al día de la actualidad científica, seguida de cerca por la televisión. Dentro de internet, la población prefiere las redes sociales y los vídeos, que han experimentado ambos un incremento significativo con respecto a 2014. Dicho incremento ha sido realmente notorio en facebook, consolidándose así, aún más si cabe, como la red social preferida para dicho fin.

ALFABETIZACIÓN CIENTÍFICA


En este apartado tenemos una muy buena noticia: la alfabetización científica sigue creciendo. Esto se ha demostrado realizando preguntas sobre cultura científica básica y anotando las respuestas de los participantes. Los resultados reflejan que el promedio de respuestas acertadas ha sido del 76,6%, superando de nuevo con creces el de 2014, lo cual es muy satisfactorio para todos aquellos que apoyan la divulgación de la ciencia.

OPINIÓN SOBRE DONACIÓN A LA CIENCIA


Para terminar, en la encuesta de 2016 del FECYT también se ha vuelto a preguntar a la ciudadanía sobre la prioridad de destinar dinero público a la ciencia y si estarían dispuestos a realizar una donación desinteresada a ella. El porcentaje de encuestados a favor de ambas cuestiones ha descendido. En el caso de las donaciones a a ciencia, el porcentaje de gente dispuesta a llevarlas a cabo ha sido del 53%, mientras que en 2014 fue del 64,7% y en 2012 del 57,1%.

Y hasta aquí los datos estadísticos. Si después de leer este artículo os habéis quedado con ganas de saber más, podéis acceder a toda la información a través de este enlace, que os llevará al dossier informativo de la encuesta ubicado en la web del FECYT:

lunes, 28 de agosto de 2017

¿DEBEMOS REUTILIZAR LAS BOTELLAS DE AGUA?

Hoy en día existe mucha polémica sobre las posibles consecuencias adversas del bisfenol A para la salud y sobre la reutilización de las botellas de agua, y por eso he decidido escribir este artículo sobre ello.


El bisfenol A (BPA) es un compuesto sintético orgánico con dos grupos funcionales fenol que tiene efectos negativos para la salud y que está presente en algunos plásticos que comentaremos más adelante. Pero previamente vamos a hablar un poco sobre este compuesto y de esos efectos que han generado tanto revuelo. 

El bisfenol A fue sintetizado en 1891 por el científico ruso Alexander Dianin, aunque realmente no se comercializó hasta 1957. Actualmente, el uso diario de productos con este componente es tan frecuente que un estudio afirmó que 9 de cada 10 estadounidenses presentan bisfenol A en su organismo, aunque normalmente sus niveles son inferiores a la “dosis diaria tolerable”.

Diferentes estudios han constatado que el bisfenol A es un disruptor endocrino capaz de causar desequilibrios en el sistema hormonal. Tanto es así que la Unión Europea, en 2011, decidió eliminarlo de los biberones, ya que es durante la época prenatal y los primeros meses de vida donde puede conllevar más problemas debido al papel fundamental de las hormonas en dicho período.


No obstante, los efectos perjudiciales no se reducen a tales desequilibrios hormonales, sino que también parece existir una cierta relación con el descenso de los niveles de esperma y testosterona en los hombres y con los abortos y partos prematuros en las mujeres, e incluso puede tener un efecto diabetógeno y cancerígeno. También se ha comprobado que una exposición prenatal a BPA podía incrementar el riesgo de padecer asma y obesidad en la edad infantil. Vistas todas estas consecuencias negativas, no es de extrañar que Europa lo haya incluido en la lista de compuestos “altamente preocupantes”, aunque fue Canadá el primer país en calificar al bisfenol A como sustancia tóxica.

Sin embargo, tampoco hay que alarmarse en demasía. Como os dije al principio del artículo, el bisfenol A no está presente en todos los tipos de plásticos, sino solamente en algunos como resinas epoxi, policloruro de vinilo (PVC) y policarbonatos (PC). Y vosotros os preguntaréis: ¿cómo podemos saber el tipo de plástico del que está hecho un envase? Pues bien, esto es posible porque existe un sistema de identificación de los materiales de envasado, de modo que cada tipo de plástico lleva su símbolo triangular con un número determinado en el centro, tal y como os mostraré a continuación. La correspondencia de los números con los diferentes tipos de plásticos es la siguiente:

1: Tereftalato de Polietileno (PET)
2: Polietileno de Alta Densidad (HDPE)
3: Cloruro de Polivinilo (PVC)
4: Polietileno de Baja Densidad (LDPE)
5: Polipropileno (PP)
6: Poliestireno (PS)
7: Todos los demás: resinas de plástico o mezclas (OTHER)



Una vez aclarado esto, quería contaros que, generalmente, el plástico utilizado para la fabricación de botellas de agua, refrescos y aceite es el PET, el cual no contiene bisfenol, por lo que esos bulos que circulan por ahí acerca de la presencia de bisfenol A en las botellas de agua quedan totalmente desmontados. Por lo tanto, en la botella de PET debe aparecer el simbolito con el 1 en su interior y podemos concluir que, en este sentido, no hay problemas de seguridad para la salud al reutilizar las botellas de plástico. En efecto, estudios sobre el PET han demostrado que es seguro para los usos a los que se destina, tal y como explican aquí: The Safety of Polyethylene Terephthalate (PET)

Otros productos que tampoco llevan bisfenol son aquellos destinados a la lactancia y la edad temprana, como las vajillas para los niños o los biberones, puesto que en Europa se ha prohibido su uso como medida de precaución, tal y como ya hemos mencionado anteriormente.

Por el contrario, sí hay que tener cuidado con aquellos recipientes de plástico a base de resinas epoxi, PVC o policarbonatos, ya que estos sí contienen bisfenol A. Obviamente, el problema no es la simple presencia de este compuesto en los plásticos, sino su posible liberación al contenido con su posterior ingestión por parte de los seres humanos o los animales.


Volviendo al tema del PET de las botellas de agua, cabe decir que, aunque nos hayamos quitado del medio al bisfenol, este material no está todavía exento de controversia. Esto se debe a que otros compuestos del PET podrían migrar al agua y podrían tener algunas implicaciones sobre la salud, pero aún no está del todo claro. Los compuestos señalados son ftalatos, antimonio, formaldehído y acetaldehído. No obstante, lo cierto es que ya se han llevado a cabo estudios sobre estas sustancias y los resultados parecen reflejar que, en condiciones normales de uso, todas ellas se encuentran en concentraciones tan bajas que no merecen preocupación alguna. Por lo tanto, aún no se han obtenido claras evidencias de que el PET pueda conllevar un riesgo real para la salud, pero de la misma manera, todavía son necesarios resultados más concluyentes para descartar otros más contradictorios y poder poner fin a la polémica aún abierta.

Recapitulando, como conclusión de todo lo dicho hasta ahora y dejando a un lado las hipótesis poco fundamentadas sobre estos otros compuestos, podemos decir que el bisfenol A deja de ser el mayor problema de estas botellas de plástico (al no estar presente en ellas) y este puesto pasa a ser ocupado por su higiene, puesto que sí es cierto que las bacterias prosperan en ambientes cálidos y húmedos y se adhieren con facilidad al plástico. De este modo, los expertos coinciden en que el mayor riesgo para la salud que puede suponer la reutilización de estos recipientes es de tipo microbiológico. Por ello, se recomienda lavarlas con agua y jabón y dejarlas secar, para después mantenerlas en un entorno limpio, fresco y seco, protegido de los rayos solares. Con todo, dicho lavado con agua y jabón que es conveniente para eliminar los microorganismos que pudieran crecer, favorece asimismo el deterioro de la botella. Además, a este deterioro provocado por el lavado, hay que sumarle el mecánico, es decir, el producido por el uso diario que puede dar lugar a grietas en el plástico que constituyen un lugar idóneo para albergar bacterias. 

Por todo ello, lo aconsejable es usar preferiblemente envases de cristal, no abusar de la reutilización de los envases plásticos y no someterlos a altas temperaturas, puesto que, al igual que otros factores como un mayor tiempo de contacto o un pH ácido, aumentan la liberación de bisfenoles del plástico. Por este mismo motivo, debemos evitar también la comida precocinada, que se calienta en el microondas directamente con el envase.

jueves, 17 de agosto de 2017

ACCIÓN DE LA SELECCIÓN NATURAL SOBRE LAS PROTEÍNAS ONCOSUPRESORAS

Un tumor es, en pocas palabras, un conjunto de células de nuestro propio cuerpo que se han rebelado contra nosotros y que continúan dividiéndose más allá de lo que lo haría una célula normal.

En cada división de cada célula normal de un organismo pluricelular existe una cierta probabilidad de que su ADN sufra una mutación cancerígena, que puede hacer que la célula se multiplique sin restricciones, que invada tejidos vecinos, que eluda las defensas del sistema inmunitario o que atraiga vasos sanguíneos que le suministren energía y oxígeno.



La selección natural no tiene poder para eliminar el cáncer. Sin embargo, dentro de la innegable vulnerabilidad del organismo al cáncer, contamos con mecanismos defensivos, aunque estos tienen limitaciones. Entre las defensas más eficaces contra el cáncer encontramos las proteínas oncosupresoras, que podrían evitar la tumoración mediante la supervisión de la reproducción de cada célula. En el caso de que alguna de ellas se multiplicase de manera anormal, estas proteínas inducirían a su muerte o a un proceso de senescencia, en el cual la célula sobrevive pero no se puede reproducir. A pesar de esto, no todo acerca de este tipo de defensas son buenas noticias.

La proteína oncosupresora o supresora de tumores más conocida es la p53, vulgarmente llamada “guardián del genoma”. Su acción consiste en unirse a las regiones promotoras de los genes reguladores del ciclo celular, expresando proteínas que van a detener el ciclo en la fase G1, antes de la fase de síntesis, para que se pueda producir previamente la reparación. También activa genes reparadores del ADN y la apoptosis, que es la muerte celular programada o suicidio celular controlado genéticamente. La importancia de dicha proteína queda patente cuando vemos que la mitad de los tumores tienen el gen p53 mutado, pero a continuación vamos a centrarnos en algunos descubrimientos realizados sobre otra proteína oncosupresora: la p16.

Estudios llevados a cabo sobre dicha proteína, cuya acción consiste en bloquear la actividad de una quinasa dependiente de ciclina (cdk), sugieren que, en efecto, está relacionada con una menor susceptibilidad al cáncer en edades tempranas, pero también se asocia con un efecto negativo: el envejecimiento celular. Y nos podemos preguntar: ¿por qué la selección natural ha operado a favor de proteínas supresoras de tumores como esta, si tienen consecuencias tanto beneficiosas como perjudiciales? La respuesta parece sencilla: la selección natural antepone todo aquello que incrementa las probabilidades de transmitir la información de generación en generación a la posibilidad de vivir más tiempo y mejor. Y de hecho, la probabilidad de sufrir algún tipo de cáncer no es precisamente despreciable como para que sea pasada por alto por esa mano invisible que es la selección natural.

Cuando una célula entra en dicho estado de senescencia obligado por la proteína p16, se produce el cese de su multiplicación junto con un desequilibrio proteico, sintetizando el factor de crecimiento vascular endotelial (VEGF). Este factor activa la angiogénesis y promueve un extra de nutrientes favoreciendo el posible desarrollo de un tumor. Por lo tanto, esta proteína p16 haría a los ancianos, de forma indirecta, más vulnerables al cáncer. De esta manera, su función realmente no es evitar sino retrasar el cáncer, es decir, reducir las probabilidades de que los jóvenes lo padezcan, pudiendo así tener descendencia.

No obstante, también algunos niños sufren cáncer. Concretamente, el retinoblastoma (cáncer de retina) afecta principalmente a dicha parte de la población. Ante este hecho, se nos plantea otra cuestión: ¿por qué la selección natural no favorece las defensas contra este tipo de cáncer? La respuesta es cruel pero sencilla también: la retina es un tejido muy pequeño en comparación, por ejemplo, con el colon, además de dejar de multiplicarse a los cinco años de edad, por lo que la magnitud del riesgo de cáncer del segundo tipo es mucho mayor que el de retina y la selección natural le atribuye una importancia mucho mayor a las defensas que se oponen al cáncer de colon con el mismo fin de siempre: aumentar el éxito reproductivo.

sábado, 5 de agosto de 2017

LA CARA Y LA CRUZ DE LOS EFECTOS DE LA CAFEÍNA

Hoy hablaremos del café, la bebida más consumida en el mundo después del agua, lo cual no es de extrañar si pensamos que es un clásico indispensable en la mayoría de los desayunos para comenzar cada día con energías. En Europa, donde el café llegó en el siglo XVII, la población adulta consume actualmente un promedio de 200 miligramos diarios, llegando a alcanzar los 400 miligramos en los países nórdicos como Dinamarca, Finlandia, Noruega y Suecia.


La cafeína, que fue descubierta en 1819 por el químico alemán Friedrich Ferdinand Runge, está presente en el café, en el té, en el chocolate, en las bebidas de cola y en las energéticas. La cafeína es el principal alcaloide del grupo de las metilxantinas y su nombre sistemático es 1,3,7-trimetilxantina. En los alcaloides se incluyen también la teína, la morfina, la nicotina, la cocaína, la quinina y la codeína, y todos ellos son compuestos nitrogenados que se encuentran sobre todo en las hojas, las semillas, las raíces o los frutos de ciertas especies vegetales con una función defensiva.

La cafeína actúa fundamentalmente como un estimulante del sistema nervioso central, ya que tiene una estructura similar a la adenosina y puede actuar como un inhibidor competitivo de la misma, adheriéndose a sus receptores e impidiendo que esta se una a ellos. Así, al bloquear los receptores A1 y A2A de la adenosina, la cafeína se comporta como un antagonista de los efectos sedantes e inhibitorios que tiene este nucleósido sobre las neuronas, manteniéndonos despiertos y potenciando nuestro rendimiento físico y mental.

Una vez ingerida, la cafeína pasa al torrente sanguíneo y se une a algunas proteínas del plasma, alcanza su máxima concentración a los 30 minutos o una hora después y cruza la barrera hematoencefálica para llegar al cerebro, donde se une a los receptores de la adenosina y desempeña su función más conocida, siendo su semivida plasmática de unas 3 horas. Después, una vez que la cafeína ha sido distribuida por todo el cuerpo, esta es metabolizada parcialmente en el hígado mediante reacciones de desmetilación en las que interviene la enzima citocromo P450 oxidasa, de modo que la ruptura de la molécula va a dar lugar a tres metabolitos llamados paraxantina, teobromina y teofilina, que serán finalmente excretados a través de la orina.

En realidad, los efectos de la cafeína son múltiples, aunque estos pueden variar de un individuo a otro según la genética, la edad y el peso:

1- Como estimulante del sistema nervioso central, mantiene el estado de alerta y mejora la concentración, el tiempo de respuesta, la memoria a corto plazo, la asociación de ideas y la percepción de los sentidos.

2- Disminuye el sueño y la fatiga.

3- A nivel cardiovascular, aumenta la tensión arterial y la frecuencia cardíaca de manera transitoria. Además, es un vasodilatador a nivel periférico y un vasoconstrictor a nivel de las arterias cerebrales, por lo que alivia las migrañas y las cefaleas.

4- Actúa como broncodilatador débil, por lo que puede reducir los síntomas del asma.

5- Tiene efecto diurético, incrementando el deseo de orinar al aumentar el flujo sanguíneo a los riñones y disminuyendo la reabsorción de agua y sodio especialmente a nivel del túbulo proximal, lo cual también puede contribuir, en cambio, a la deshidratación y el estreñimiento.

6- Facilita una buena digestión, ya que la cafeína se une a los receptores nicotínicos o muscarínicos de la mucosa del estómago e incrementa la secreción de jugos gástricos como el ácido clorhídrico y la pepsina y también de enzimas en el páncreas como la lipasa y la proteasa pancreática, ayudando a que los alimentos se digieran más rápido.

7- Es beneficioso para la piel, ya que el café es una fuente de antioxidantes que absorben los radicales libres, protegiendo frente a los daños que estos pueden causar y frenando el envejecimiento de la piel.

8- Aumenta los niveles de adrenalina en el plasma sanguíneo, como consecuencia del efecto vasoconstrictor a nivel cerebral.

9- Además, la cafeína va a incrementar los niveles de noradrenalina mediante la inhibición de las fosfodiesterasas que conlleva un aumento de AMPc y GMPc intracelular y este, consecuentemente, la síntesis de noradrenalina.



Sin embargo, a pesar de sus beneficios y aunque la cafeína figure en la listas GRAS (sustancias generalmente consideradas como carentes de riesgo), el abuso del café puede producir excitación, ansiedad, insomnio, irritabilidad, temblor fisiológico e hiperactividad refleja, además de desarrollar una dependencia física de algunos de los efectos de la cafeína debido a una neuroadaptación en el cerebro. Conforme incrementamos el consumo de cafeína, el cerebro produce menos adenosina y se generan más receptores para hacer frente a la mayor demanda. Por esta razón, cada vez necesitamos más cafeína para obtener el mismo efecto, hasta llegar a un punto en el que parezca que el café ya no nos afecta, aunque esto en verdad no es así, ya que la tolerancia se desarrolla de distinta manera en sus variados efectos.

Por el contrario y de la misma manera, si reducimos nuestro consumo de cafeína, muchos de los receptores que se habían creado para suplir esa mayor demanda ahora se quedan libres y para cubrirlos se incrementa la producción de adenosina. Por este motivo, al disminuir la dosis diaria de café, vamos a experimentar ahora una sensación de somnolencia mucho mayor que anteriormente.

En definitiva, es cierto que el café tiene una serie de beneficios, pero debemos tomarlo con moderación, en su justa medida. En realidad, sus efectos serán positivos o negativos dependiendo de la cantidad en la que se consuma.

jueves, 27 de julio de 2017

¿POR QUÉ PACIENTES CURADOS DE CÁNCER DESARROLLAN DEPRESIÓN?: NEUROGÉNESIS

Diferentes estudios han demostrado que la neurogénesis está relacionada con la depresión, de manera que un paciente con este trastorno mental presenta un nivel inferior de neurogénesis (proceso de generación de nuevas neuronas y células gliales). Y de la misma manera, la toma de antidepresivos conlleva un incremento de este proceso. Por lo tanto, la asociación entre ambos factores de estudio parece bastante evidente.


Una vez que sabemos esto, volvamos a la pregunta en cuestión: ¿Por qué pacientes curados de cáncer desarrollan depresión? La lógica nos dice que, después de haber conseguido salir de tal embrollo, esas personas deberían presentar unas ganas de vivir enormes y una alegría exultante, pero la experiencia nos demuestra que, en la mayoría de los casos, ocurre todo lo contrario. Esto se debe a que el mismo tratamiento que frena la multiplicación de las células cancerígenas frena también la neurogénesis y lleva un tiempo generar nuevas neuronas para recuperar la normalidad, período durante el cual el paciente manifiesta esa depresión.


Y efectivamente, por si a alguien todavía le quedaba alguna duda al respecto, los adultos también desarrollan nuevas neuronas, tal y como acabas de leer. Ya es un hecho demostrado que la neurogénesis continua aun después de haberse completado el desarrollo del individuo, quedando ya atrás aquel viejo dogma de la neurobiología que desmentía la regeneración neuronal y que, no obstante, estuvo vigente hasta los años 90.

En la neurogénesis está especialmente implicado el hipocampo, que es una estructura gris que forma parte del sistema límbico y que desempeña también otras importantes funciones como la memoria, el aprendizaje, el estado anímico y las emociones. Se estima que generamos unas 700 nuevas neuronas al día en el hipocampo, una cantidad aparentemente pequeña si la comparamos con los miles de millones que tenemos, pero lo cierto es que a los 50 años habremos cambiado todas las neuronas con las que nacimos en esa zona. Por lo tanto, esta neurogénesis en el estado adulto es mucho más importante de lo que podríamos pensar. De hecho, se ha comprobado también que si frenamos dicha capacidad de regeneración, la memoria se ve mermada.

Dada la trascendencia de la neurogénesis, te puedes estar preguntando ahora: ¿cómo podemos favorecer este fenómeno? ¿Podemos controlarlo? Afirmativo. El estrés, la falta de sueño y el envejecimiento dificultan la neurogénesis, mientras que actividades como el aprendizaje, la actividad física, el sexo o una buena dieta (tanto en lo referente a los nutrientes como a la textura de los alimentos) promueven la neurogénesis. Se ha comprobado que la reducción de calorías de la dieta o la toma de alimentos con flavonoides, ácidos grasos omega-3 y resveratrol tienen este efecto, mientras que las grasas saturadas, el alcohol y los alimentos blandos tiene un efecto contrario. Sabemos que llevar una buena alimentación es fundamental, ya que no solo repercute sobre la neurogénesis, sino también en la memoria y en el estado de ánimo, produciendo una mejora o un agravamiento de los síntomas de la depresión en caso de no cuidar la dieta. Por lo tanto, el efecto de esta sobre la salud mental parece estar mediada por el proceso de generación de nuevas neuronas.


Dicho todo esto, te dejo a cargo de tu neurogénesis, pero ahora eres conocedor de que sigues generando nuevas neuronas y de que puedes intervenir, en cierto modo, en este proceso. ¿Te vas a quedar de brazos cruzados?


viernes, 21 de julio de 2017

INSERTAN UN GIF EN EL ADN DE UNA BACTERIA: SISTEMA CRISPR/Cas

Los GIFs están a la orden del día y cada vez estamos más habituados a usarlos en whatsapp, en twitter… Este formato de imagen ya está integrado en nuestro día a día y ahora un grupo de científicos de la Universidad de Harvard ha conseguido introducir también uno de ellos en el ADN de una Escherichia coli, algo que era impensable hasta el momento.

En pocas palabras, lo que han hecho ha sido reducir el GIF de un caballo galopando a unos 900 píxeles en diferentes tonos de gris, codificar cada uno de ellos en eslabones de ADN e insertarlos en el código genético de una bacteria. Finalmente, esperaron a que la célula bacteriana se reprodujera, extrajeron el ADN de uno de sus descendientes y lo secuenciaron. Al descodificarlo, sorprendentemente, podían volver a observar el mismo GIF, solo que con un 10% menos de calidad.


Ahora bien, nos podemos preguntar: ¿para qué puede servir, en este caso, insertar un GIF en el material genético de una bacteria? Probablemente este avance pueda permitirnos usar bacterias como pequeñas cámaras de vídeo, accediendo a información de lugares a los que no podríamos llegar de otra manera. Por lo tanto, esto puede servir no solo para codificar información que ya tenemos, sino para llegar a información desconocida hasta el momento. Incluso podrían reportarnos el instante en el que fue grabada dicha información. En definitiva, puede constituir un camino para comprender mejor el cuerpo humano.

Cabe destacar que, para introducir esa información del GIF en el cromosoma bacteriano y llegar a este avance, ha sido fundamental el uso de la técnica de edición genómica CRISPR/Cas, que deriva de un sistema inmune presente en las bacterias para defenderse de la invasión de virus o plásmidos. Este sistema consta de una proteína Cas9 y un ARN guía, el cual consta de tan solo 20 bases nitrogenadas y es barato y fácil de diseñar. El funcionamiento es el siguiente: cuando el complejo CRISPR formado por ambos componentes encuentra un punto de la doble hélice en el que coincide el ARN guía, se inserta ente las dos cadenas, la proteína Cas9 corta y, a continuación, la célula procede a su reparación mediante dos posibles vías. Una de ellas simplemente vuelve a unir las dos partes de nuevo, por lo que no es muy eficaz. La segunda vía, en cambio, es mucho más interesante, ya que se requiere un fragmento de ADN homólogo. Aquí es donde podemos intervenir, ya que es posible poner otro ADN de interés que tenga homología en ambos extremos aunque sea diferente en el medio. Además, lo especial de este sistema radica en que podemos cortar e insertar un fragmento justo en el punto que queramos. Por este motivo, este sistema resulta enormemente prometedor y puede ser una vía para nuevos avances.



El científico español Francisco J. M. Mojica, uno de los mayores partícipes del descubrimiento de este sistema al ser el primero en estudiar las secuencias CRISPR, habla así sobre su repercusión: "Con los sistemas CRISPR/Cas estamos inmersos en una revolución que amenaza con cambiarnos la vida, incluso más que Internet o el teléfono móvil, pero desde un punto de vista más saludable. Se prevé que estos sistemas puedan curar enfermedades hasta ahora intratables."


La única "pega" que se le puede poner a esta tecnología CRISPR son las consideraciones éticas que le rodean, ya que también podría ser utilizada para la edición de la línea germinal en humanos con un riesgo de consecuencias indeseadas que, en caso de suceder, se podrían transmitir a la descendencia. Por lo tanto, dado el desconocimiento al respecto hasta el momento, se advierte racionalizar su uso, pero la experiencia nos anima a verlo claramente como una potente herramienta para mejorar la calidad de vida más que como un riesgo.

Entre otras aplicaciones del sistema CRISPR/Cas que ya se están llevando a cabo, se encuentran: mosquitos modificados genéticamente para que no puedan transmitir la malaria, eliminación de genes dañinos en cerdos para poder trasplantar sus órganos a personas y control de los genes específicos de las bacterias que las hacen resistentes a antibióticos.

Sin embargo, se prevén muchas más utilidades. El tiempo nos dará la respuesta sobre el alcance de este prometedor sistema CRISPR/Cas. Veremos lo que nos depara el futuro. Por ahora, las posibilidades parecen ser inimaginables.



lunes, 23 de enero de 2017

¿ES BUENO DUCHARSE TODOS LOS DÍAS?

Antes de adentrarnos con esta pregunta, es conveniente recordar que la piel es el órgano fundamental en la homeostasis, es decir, en el mantenimiento de la composición y las propiedades del medio interno del organismo, ya que actúa como una barrera de protección mecánica, solar, inmunológica y térmica que alberga además la función sensorial del tacto y evita la pérdida de agua, electrolitos y otros constituyentes corporales y también la entrada de moléculas y microorganismos indeseables o nocivos desde el medio ambiente. Asimismo, sabemos que la piel consta de tres capas principales, cada una de las cuales está compuesta por varias subcapas. La capa más externa es la epidermis, que está formada, de fuera a dentro, por el estrato córneo, el estrato lúcido, el estrato granuloso, el estrato espinoso y el estrato basal. A continuación, tenemos la dermis, que se divide, a su vez, en una capa superior o estrato papilar y una capa inferior o estrato reticular. Y por último, tenemos la tercera y última capa, la más interna, que se llama hipodermis.


Pues bien, los estudios realizados demuestran que una higiene excesiva puede dañar la capa más externa de la piel, que es precisamente la capa córnea de la epidermis, la cual posee una serie de bacterias benignas que constituyen una barrera protectora frente a las infecciones y la entrada de bacterias, virus, hongos o cualquier otro agente externo perjudicial. Los dermatólogos aseguran que una excesiva exposición al agua y al jabón supone una constante agresión a nuestra piel, que puede acabar seca e irritada, además de hacerla más vulnerable a las agresiones externas al debilitar esa primera barrera defensiva compuesta por el estrato córneo y el manto hidrolipídico que lo recubre, que es una mezcla de sebo producido por las glándulas sebáceas y sudor segregado por la glándulas sudoríparas. Por lo tanto, bacteriológicamente hablando, no estamos más protegidos frente a una posible infección duchándonos todos los días, sino al contrario. De hecho, la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV) ha elaborado una lista en la que se recogen una serie de enfermedades asociadas a la sobrehigiene, como la dermatitis atópica, infecciones como la pitiriasis o alergias.


Por ello, dejando de lado cuestiones de sostenibilidad, los expertos afirman que ducharse todos los días es perjudicial y recomiendan disminuir la frecuencia con la que acudimos a la ducha. Sin embargo, tan malo es un exceso de higiene como una carencia de ella. Simplemente hay que evitar esos remojones de más que en ocasiones son por el efecto relajante o por la sensación refrescante en verano. Como siempre, “la virtud está en el término medio”, tal y como decía Aristóteles, y en este caso, ese término medio depende también de cada persona, de modo que debemos adaptar la frecuencia de la ducha a cada uno, en función del clima y del ejercicio físico que realicemos.




Lo que es cierto es que las partes más necesitadas de un lavado diario son genitales, pies y axilas, obviando la higiene de las manos, que debe ser aún más frecuente. Pero el resto de la piel puede no precisar un lavado diario si no se ha realizado un esfuerzo físico.




Además, se recomienda el uso de agua fría o templada; jabones neutros, preferiblemente elaborados con aceites vegetales y con bajo contenido de detergente o productos químicos dañinos; y una toalla del material más suave posible. Por un lado, debemos evitar los baños de agua caliente porque, aunque relajan los músculos, tienen muchos más perjuicios de los que probablemente creas. En verdad, el uso frecuente de agua a alta temperatura favorece la caída del cabello, la oleosidad y la liberación de sebo por parte de las glándulas, la aparición de caspa, la urticaria, la aspereza de la piel o una mala digestión. Por otro lado, el motivo por el que es conveniente el uso de jabones neutros para nuestra piel es evitar la alteración del pH de la capa de lípidos, que es ligeramente ácido, entorno al 5,5, ya que esto es lo que evita el paso de baterías y virus. Además, debemos prescindir absolutamente de aquellos jabones antibacterianos que, lejos de ser mejores que el resto, tienen componentes como el triclosán (también presente en otros productos de higiene personal como pastas de dientes, desodorantes o enjuagues bucales), que causa perjuicios a nuestra salud como alteraciones hormonales y también de la función muscular y cardíaca, puesto que interfiere en la liberación de los iones calcio al impedir la correcta comunicación entre dos proteínas que funcionan como canales de calcio.